domingo, 25 de diciembre de 2011

LÁZARO




Rememora Lázaro la noche aciaga
en que la muerte fue tu cómplice, el triste neón de sus luces cetrinas,
el velado rumor de la lluvia interminable.
El olor de cosas enfermas,
la aséptica, química esperanza del dolor físico mitigado por el veneno.


El cuerpo cercenado y convicto, las extremidades deformadas,
la sangre sucia.
Los horas que fueron eternas bajo el destello de los fluorescentes,
horas sin día, noches sin aurora,
rastros de vida impaciente, confiada a la suerte de los circuitos.
El murmullo de una condena, la carne lacerada y sufriente, su torpe humanidad.


Las plegarias, Lázaro, y la extrema orfandad del cordero,
cuando ceden las barreras, la certeza del suelo protector y seguro,
y solo queda una oración que llevarse a los labios.
Recuerda todo esto al oír tremolar la losa,
y la voz cálida que te convoca a la luz amable del día.


Se fueron las células rebeldes, el ardor,
la terca interferencia de los intestinos,
la piel avergonzada, los estigmas, su pudor.


Nada queda ya del hombre que fuiste,
tus hijos apenas recuerdan tu nombre.
Otro rostro se mira en tus espejos,
habita tus rincones favoritos,
se asoma al tálamo conyugal,
horadando tu ausencia sin duelo,
el peso y la levedad de tus huesos,
las promesas de amor eterno, de eterna fidelidad.


¿Quién escribirá tu epitafio, le dirá al viento donde fuiste, te echará de menos?.
Levántate y anda.
Un ángel te llama, te conmina a salir al implacable sol del mediodía,
mientras tú buscas el refugio de la noche,
el vasto consuelo del sueño.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Meditación


"¿Puedes imaginar una vida en la que te niegues a disfrutar de una sola palabra de aprobación y de aprecio o a contar con el apoyo de un brazo amigo; una vida en la que no dependas emocionalmente de nadie, de manera que nadie tenga ya el poder de hacerte feliz o desdichado; una vida en la que no necesites a ninguna persona en particular, ni ser especial para nadie, ni considerar a nadie como propio?

Hasta las aves del cielo tienen nidos, y los zorros guaridas, pero tú no tendrás dónde reposar tu cabeza a lo largo de la travesía de la vida.
Si alguna vez llegas a ese estado, al fin sabrás lo que significa ver con una visión despejada y no enturbiada por el miedo y el deseo. Y también sabrás lo que significa amar. Pero para llegar a esa región del amor deberás soportar el trance de la muerte, porque amar a las personas supone haber muerto a la necesidad de las mismas y estar absolutamente solo."

ANTHONY DE MELLO



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lunes, 28 de noviembre de 2011



Los labios que son tan cálidos podrían ser
Labios que hablan demasiado pronto
Los labios que cuentan una historia
Triste y profunda como tú

Sonrisa que es cálida como el sol de verano
Sonrisa que te lleva a través
Sonrisa que cuenta una historia
Triste y profunda como tú

Ojos que son ventanas
Ojos que son el punto de vista
Ojos que cuentan una historia
Triste y profunda como tú

Las lágrimas son palabras que no se dicen
Lágrimas que son la verdad
Lágrimas que cuentan una historia
Triste y profunda como tú

jueves, 31 de marzo de 2011

TEDDY


"¿Se acuerda de la manzana que Adán comió en el jardín del Edén, como se cuenta en la Biblia? -preguntó-. ¿Sabe lo que había en esa manzana? Lógica. La lógica y además cosas intelectuales. Eso es lo único que tenía adentro. Así que (esto es lo que quiero señalar) lo que tiene que hacer es vomitar todo eso si quiere ver las cosas como realmente son. Quiero decir que si lo vomita entonces no va a tener más problemas con bloques de madera y cosas así. Ya no verá las cosas detenidas todo el tiempo. Y sabrá qué es en realidad su brazo, si le interesa saberlo. ¿Comprende lo que quiero decir? ¿Me entendió?"

"-Es tan tonto -dijo Teddy otra vez-. Por ejemplo, tengo una lección de natación dentro de cinco minutos. Podría bajar a la piscina y encontrarme con que no tiene agua. Podría ser el día en que cambian el agua, por ejemplo. Podría pasar, por ejemplo, que yo caminara hasta el borde, como para mirar el fondo, y que mi hermana viniera y me diera un empujón. Podría fracturarme el cráneo y morir instantáneamente -Teddy miró a Nicholson-. Podría ocurrir -dijo-. Mi hermana solo tiene seis años, y no hace muchas vidas que es ser humano, y no me quiere mucho. Podría pasar, desde luego. -Pero ¿qué tendría de trágico? ¿De qué podría tener miedo? Después de todo, yo no estaría haciendo más que lo que debo hacer, ¿verdad?

Nicholson gruñó suavemente.
-Tal vez no fuera una tragedia desde tu punto de vista, pero seguramente sería una cosa triste para tu mamá y tu papá -dijo-. ¿No pensaste en eso?
-Sí, claro que lo pensé -dijo Teddy-. Pero solo es porque tienen nombres y emociones para todo lo que ocurre -había tenido las manos metidas debajo de los muslos pero las sacó de nuevo, las metió debajo de las axilas, y miró a Nicholson-. ¿Conoce a Sven, eI encargado del gimnasio? -preguntó. Esperó a que Nicholson asintiera-. Bueno, si Sven soñara esta noche que se muere su perro, dormiría muy mal, porque le tiene enorme cariño a ese perro. Pero al despertarse por la mañana, todo estaría bien. Se daría cuenta de que todo había sido nada más que un sueño.
Nicholson asintió: -¿Qué quieres decir, exactamente?
-Que si el perro muriera de verdad, sería exactamente lo mismo. Solo que no se daría cuenta. Se daría cuenta únicamente al morir él mismo."

TEDDY. J. D. Salinger

lunes, 24 de enero de 2011

VERGUENZA DE SER BUENO


"A veces, nos da verguenza hacer el bien. Nuestro sentimiento de culpa siempre intenta convencernos de que, cuando actuamos con generosidad, en realidad queremos impresionar a los demás, "sobornar a Dios", etc. A gran parte de la humanidad le cuesta aceptar que nuestra naturaleza es esencialmente buena.
Todos conocemos en nuestra vida personas que intentan ocultar sus gestos buenos con ironía y distanciamiento, como si el amor fuese sinónimo de flaqueza."

Paulo Coelho

martes, 18 de enero de 2011

DEVASTADO


SALMO 91 / A la protección divina

Tú que vives bajo la protección del Dios altísimo
y moras a la sombra del Dios omnipotente,
dí al Señor "Eres mi fortaleza y mi refugio,
eres mi Dios, en quien confío".
Pues él te librará de la red del cazador,
de la peste mortal;
te cobijará bajo sus alas
y tú te refugiarás bajo sus plumas;
su lealtad será para tí escudo y armadura.
No temerás el terror de la noche
ni la flecha que vuela por el día,
ni la peste que avanza por en las tinieblas
ni el azote que asola al mediodía.
Aunque a tu lado caigan mil, y diez mil a tu diestra,
a tí no te alcanzará la desgracia
ni la plaga llegará a tu tienda,
pues él ordenó a sus santos ángeles
que te guardaran en todos tus caminos;
te llevarán en sus brazos
para que tus pies no tropiezen en piedra alguna;
andarás sobre el león y la serpiente,
pisarás al tigre y al dragón.
Porque él se ha unido a mí, yo lo libraré;
lo protegeré, pues conoce mi nombre;
si me llama, yo le responderé,
estaré con él en la desgracia,
lo libraré y lo llenaré de honores;
le daré una larga vida,
le haré gozar de mi salvación.